jueves, 17 de mayo de 2018

QUE TODOS SEAN UNO

Evangelio según San Juan 17,20-26.
Jesús levantó los ojos al cielo y oró diciendo: "Padre santo, no ruego solamente por ellos, sino también por los que, gracias a su palabra, creerán en mí. Que todos sean uno: como tú, Padre, estás en mí y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste.
Yo les he dado la gloria que tú me diste, para que sean uno, como nosotros somos uno -yo en ellos y tú en mí- para que sean perfectamente uno y el mundo conozca que tú me has enviado, y que yo los amé cómo tú me amaste. Padre, quiero que los que tú me diste estén conmigo donde yo esté, para que contemplen la gloria que me has dado, porque ya me amabas antes de la creación del mundo. Padre justo, el mundo no te ha conocido, pero yo te conocí, y ellos reconocieron que tú me enviaste. Les di a conocer tu Nombre, y se lo seguiré dando a conocer, para que el amor con que tú me amaste esté en ellos, y yo también esté en ellos".
*La oración de Jesús es modelo de toda oración. En la oración se manifiesta más profundamente la unión de Jesús con su Padre. Y quiere que esa unión la tengamos entre nosotros. Un distintivo claro de los seguidores de Jesús es la unidad.-
*La unidad plena,absoluta, sin fisuras se dará en la gloria junto a la Trinidad, pero esa experiencia comienza en la comunidad terrenal. La unidad es requisito previo a la comunión eucarística.
*La unidad de los cristianos sigue su camino de diálogo y de encuentros. Por momentos parece que llegaremos a la comunión plena y por momentos parece que el enemigo siembra cizaña. "Padre que sean uno"... Esa oración nos hace buscar siempre la unidad.
Bendecido día-

No hay comentarios: