San Marcos 1,21b-28.
Jesús entró a Cafarnaún, y cuando llegó el sábado, Jesús fue a la sinagoga y comenzó a enseñar. Todos estaban asombrados de su enseñanza, porque les enseñaba como quien tiene autoridad y no como los escribas. Y había en la sinagoga un hombre poseído de un espíritu impuro, que comenzó a gritar: "¿Qué quieres de nosotros, Jesús Nazareno? ¿Has venido para acabar con nosotros? Ya sé quién eres: el Santo de Dios". Pero Jesús lo increpó, diciendo: "Cállate y sal de este hombre". El espíritu impuro lo sacudió violentamente y, dando un gran alarido, salió de ese hombre.
Todos quedaron asombrados y se preguntaban unos a otros: "¿Qué es esto? ¡Enseña de una manera nueva, llena de autoridad; da órdenes a los espíritus impuros, y estos le obedecen!". Y su fama se extendió rápidamente por todas partes, en toda la región de Galilea........
+JESÚS está vivo y sigue hablando al hombre y mujer de hoy. Hay tantos "espíritus impuros" en el siglo XXI que esclavizan la vida y dignidad de las personas como en aquél entonces. Hay que buscar y dejarse encontrar por Jesús que sana, salva, reconstruye, libera, da vida. Pidamos a El vivir en la libertad de los hijos de Dios.
+Los malos espíritus de esta época también le preguntan a Jesús a modo de recriminación ¿qué quieres de nosotros? También hoy los malos espíritus blasfeman contra el santo Nombre de Dios porque les molesta que los hombres vivan como hijos de Dios... Los grandes seculizadores quieren que Dios no tenga lugar en la sociedad y lo muestran como anacrónico, como fuera de lugar, como inservible, Es una estrategia que se repite y que Jesús pone en evidencia para que nosotros "veamos" y "no permanezcamos al borde del camino". Bendecido día.
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