LUCAS 5, 1-11 (fragmento)
Jesús subió a una de las barcas, que era de Simón, y le pidió que se apartara un poco de la orilla; después se sentó, y enseñaba a la multitud desde la barca.Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: "Navega mar adentro, y echen las redes". Simón le respondió: "Maestro, hemos trabajado la noche entera y no hemos sacado nada, pero si tú lo dices, echaré las redes".
*Jesús dice navega mar adentro... Es una clara enseñanza de no quedarnos en la orilla; el misterio no puede vivirse en la orilla, hay que introducirse. El creyente que no se anima a navegar "mar adentro" está sometido por las nuevas olas de la frivolidad, superficialidad, comodidad de la orilla.
*Hemos trabajado toda la noche y no hemos sacado nada... Es una experiencia muy dura, experiencia de fracaso, de no pesca... La noche parece llegar a la fe, el sinsentido, el absurdo... Trabajamos, trabajamos, y no logramos nada... La Iglesia en no pocas situaciones a lo largo de su historia parece no pescar nada... *Si tú lo dices echaré las redes... Es la fe en la Palabra de Jesús la que nos hace echar una vez más la red cuando sabemos que no hay nada. Sin embargo, donde parece no haber nada Jesús da una gran pesca... No dudes Iglesia querida del dueño de la barca, del mar y de la pesca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario