El sacramento de la reconciliación ers la capacidad que tiene Dios de darnos su perdón cariñoso ante nuestro arrepentimiento. El abrazo del Padre amoroso ante el hijo que retorna a casa (Lucas 15).
El tratamiento terapéutico psicológico ayuda a las personas en un ámbito de la vida personal pero no perdona los pecados que esclavizan y oscurecen la vida del hombre y la sociedad.
La confesión es la experiencia vital de la misericordia del Padre Dios que en su Hijo Jesús, muerto y resucitado, nos trajo para sacarnos de Egipto (pecado y esclavitud).
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